«Nuestra preocupación principal en este momento radica en el hecho de la alta desprotección que está sufriendo el Parque Nacional El Impenetrable en los últimos meses, debido a la situación legal de que la APN aún no puede tomar posesión formal del mismo. Estas observaciones están basadas en nuestras propias visitas y relevamientos en el área (adjuntamos algunos informes de años anteriores con esta carta) y en la información que nos brinda el propio personal del Parque Nacional, así como los guardaparques provinciales que recorren los límites del mismo. El alto grado de cacería que está sufriendo el Parque, tanto en su interior, como en sus bordes, principalmente sobre el río Bermejo, es alarmante y hace peligrar la integridad de esta importante área núcleo para la especie y sus presas. En este momento, la presencia de guardaparques haciendo control y vigilancia en la zona es casi nula, y la cantidad de cazadores que se ven navegando el Bermejo y cazando en ambas márgenes del río, así como en los límites noroeste y sureste es alarmante. No solo es necesario controlar dentro de los predios del Parque, sino también patrullar sus bordes permanentemente.» reza parte de la nota que fuera presentada el día 20/12/2016 al presidente del Directorio de Parques Nacionales, en Buenos Aires.

Cazadores/pescadores muy bien equipados depredando en la costa del río Bermejo, en septiembre de 2016.

Así, los integrantes de esta subcomisión cuyo objetivo es la implementación del Plan de Emergencia para la Conservación del Yaguareté en el Gran Chaco Argentino, región donde el gran felino se encuentra al borde de la extinción (quedarían menos de 20 ejemplares en total), solicitaron:

• Designe al menos 3 guardaparques más de dedicación exclusiva (actualmente hay uno solo) para el Parque Nacional El Impenetrable, a la mayor brevedad posible.
• Gestione y garantice, mediante convenios por escrito, el apoyo de personal capacitado de Gendarmería Nacional para que acompañe los recorridos de los guardaparques en todas las bajadas al río y de ser posible en las recorridas por tierra también.
• Garantice personal y recursos para que al menos dos veces por semana se hagan patrullas de control y vigilancia: una vez por el Bermejo y otra vez por el perímetro terrestre, ambas en días al azar (para evitar el acostumbramiento de los cazadores a las mismas) y con el apoyo ya mencionado de Gendarmería Nacional.

La situación del Yaguareté en la región chaqueña es crítica y las medidas para proteger a la especie y su hábitat deben ser tomadas de manera urgente.

Esta subcomisión interinstitucional está integrada por los gobiernos de Chaco, Formosa, Santiago del Estero y Corrientes, las Delegaciones NEA y NOA de Parques Nacionales, la Red Yaguareté, Fundación Vida Silvestre, CLT y Ceiba.